Tribuna de Emiliano Martínez* en El Pais
La visión de un editor de la trayectoria de Martínez es siempre interesante y si lo que dice está cargado de razón todavía más. Reflexiona en este artículo sobre el papel que debe jugar la información en el proceso educativo.
Educación-formación-información no son sinónimos de la misma cosa, como a veces tendemos a pensar. El proceso formativo, guiado por los profesores, es mucho más complejo que una simple acumulación de datos e informaciones inconexas. La información sobre abundante (y de calidad muy diversa) que puede encontrarse en Internet a golpe de ratón puede resultar contraproducente para el proceso formativo (no es lo mismo beber agua de un manantial que nadar en el océano sin rumbo). La importancia del profesor en este océano de información que representa Internet puede compararse a la de una buena brújula (o un GPS, en este tiempo de satélites).
El desembarco de tecnología en las aulas de todos nuestros centros no es en si mismo malo ni bueno, todo depende del método y de la planificación con que se haga. En cualquier caso es algo que no se puede aplazar mucho más. Nuestros hijos, nuestros alumnos, pertenecen a una era digital que justo acaba de empezar y su formación no puede obviar este hecho. La transformación de la educación, necesaria para adaptarse a estos nuevos tiempos es una tarea ingente en la que se han de implicar múltiples "agentes" del sistema: políticos, educadores, alumnos, padres, editores, tecnólogos, etc. Se trata de un reto importantísimo y de una oportunidad única de mejorar la educación. No obstante, también tenemos la oportunidad (histórica) de "empastrarla" y muy posiblemente nuestra clase política no deje pasar la ocasión.
*Presidente del Grupo Santillana
No hay comentarios:
Publicar un comentario